7 jun 2009

3º de ESO visita al Ayuntamiento de Sevilla

El día de la visita al Ayuntamiento y al Hospital de los Venerables, quedamos en el instituto a primera hora de la mañana con nuestra mochila, bocadillos y botellas de agua porque la mañana iba a ser intensa y calurosa.
Nos desplazamos en autobús público hasta la Plaza del Duque y fuimos paseando por el centro hasta el Ayuntamiento. Allí esperamos a los guías, que nos organizaron en dos grupos, empezando por breve resumen de la historia del edificio. Vimos las maquetas de las puertas de Sevilla realizadas para la exposición del 29 en la planta baja, y nos detetuvimos en el Cabildo, es decir, la parte más antigua del edificio mandada construir por Carlos V.a principios del siglo XVI. Nos sentamos en los bancos de piedra que rodeaban la estancia para mirar la decoración escultórica que nos acercó a personajes históricos de la familia del rey, y con la explicaciones del guía nos pudimos imaninarnos a los carruajes entrando en el apeadero. En la primera planta nos enseñaron la sala de los Montpansier, la sala de prensa y el Salón de Colón.


Terminada la visita al Ayuntamiento, tras hacernos unas fotos en la puerta, nos detuvimos una media hora a desayunar y nos dirigimos caminando por las calles del barrio de Santa Cruz hacia el Hospital de los Venerables, uno de los edificios barrocos más importantes de la ciudad y que acoge a la Fundación Focus- Abengoa. Los guías nos enseñaron el lugar comenzando por la historia del edificio mientras paseamos desde el patio principal hacia la iglesia; más tarde nos detuvimos en los cuadros que alberga la fundación, algunos anónimos del siglo XVII y otros de artistas tan importantes como Murillo o Velázquez.
Antes de marcharnos nos hicimos fotos divertidas con los compañeros y profesores que nos acompañaron en los lugares más destacados. Sobre las 13,30, cogimos el autobús en la Plaza de la Encarnación para volvernos al instituto; ya con hambre, nos despedimos en la puerta comentando que lo habíamos pasado muy bien.

Crónica de la profesora Manuela Bautista Dala